viernes, junio 16, 2006

Entrevista

Al borde del pánico y la apatía.

Esos sentimientos me invadieron minutos antes de mi ultima entrevista del día. Después de siete entrevistas seguidas, esta se convirtió en una mas, y al mismo tiempo mi ultima oportunidad. Tenia muy poco dinero en la bolsa. Deudas. Si no conseguía este trabajo, no se que iba a ser de lo poco que quedaba de mi.
-Tus documentos hablan muy bien de ti- habia dicho el Señor Alvarez.
-Tengo todo lo que piden, me siento capaz de hacer el trabajo-
Pensé que debería ser mas convincente, aunque ya no me gustara mi trabajo. Diseño Interior. Ya nada importaba.
Pero antes que yo hablara, aquel Señor Alvarez se convirtió en otro mas.
Sentí aquella mirada sobre mis piernas, por mis senos, por mis labios.
-¿Cuanto dinero tienes para sostenerte?-
No debí responder, pero ya nada importaba.
-Poco-
Sentí esa mirada otra vez y me llene de asco.
-¿Que estas dispuesta a hacer?-
Que pregunta tan fácil de hacer y tan difícil de contestar.
-Todo-
Después de esa palabra sabia que todo iba a cambiar. Nada seria como antes. ¿Pero que era ese antes? Una vida sin nada porque vivir. Una vida gris, de cigarros y de alcohol.

Una hora después salí de la oficina, con empleo y con asco.
Llegue a casa y me metí a la ducha. Como si el agua pudiese limpiar las manchas.

Y ahora estoy aquí con una copa de vino tratando de quitarme aquel sabor.

2 comentarios:

amargadillo dijo...

vaya vaya!...

esa historia me gusto!...

yo atraveze por un conflicto igual...

y deveras la ducha no quita las manchas...

peor el alcojol no quita el sabor...

...

u_u... solidario!

Ernesto dijo...

una vez, un viejo rico que siempre tenía fama de andar con mujeres me dijo:
-¿sabes por qué ando con mujeres mucho más jóvenes y guapas que yo?
-no lo se...
-porque les doy dos cosas: asco y dinero.